El Presbiterio de San Joaquín construye la primera iglesia nueva en décadas para servir a las comunidades de inmigrantes
El proyecto forma parte de un modelo de ministerio multisitio que moviliza a los ancianos gobernantes comisionados
En el Valle Central de California, donde las plantaciones de mandarinas se extienden por campos bañados por el sol, familias inmigrantes de México, Guatemala, Honduras y Punjab trabajan en las cosechas que alimentan a Estados Unidos. A medida que estas comunidades trabajadoras compran sus primeras casas en pequeñas ciudades de los valles, la Iglesia Presbiteriana (E.U.A.) está aprendiendo a ser lo suficientemente ágil como para ir a su encuentro allí donde se encuentran.
Este es el lugar donde el pastor Alex González cumple su llamado como plantador de iglesias y desarrollador de liderazgo. Su visión multisitio del ministerio a las comunidades de inmigrantes está transformando la forma en que el Presbiterio de San Joaquín sirve a sus comunidades en rápida evolución. Su nueva comunidad de culto, Fuente de Gracia, recibió recientemente un premio Walton de 50.000 dólares del movimiento 1001 New Worshiping Communities del PC(USA), financiación que ayudará a construir el primer edificio nuevo del presbiterio en décadas.
"Hacía tiempo que no construíamos nada desde cero", dijo el reverendo Ara Guekguezian, presbítero ejecutivo del presbiterio de San Joaquín .. "Para las personas que han formado parte del presbiterio durante la última generación es emocionante añadir una propiedad. Recuerdan los días en que construían iglesias por todas partes"
El Valle Central encarna el espíritu innovador de California, explicó Guekguezian, pero es fundamentalmente una región agrícola donde los trabajadores inmigrantes constituyen la espina dorsal de la economía. "Cuando los armenios como mi familia llegaron aquí, trabajaban en empacadoras y en el campo, y luego vinieron los refugiados del sudeste asiático, lo mismo", dijo. "Gente de México, Guatemala, El Salvador, Honduras, Bolivia, Colombia... vienen aquí y trabajan, y emigran aquí y construyen aquí sus vidas durante generaciones"
Cuando las comunidades cambian dentro de una misma generación, las iglesias presbiterianas luchan por adaptarse. "No somos muy ágiles como la Iglesia católica romana, que puede colocar en las comunidades a sacerdotes que hablan la lengua", reconoció Guekguezian. "Tenemos iglesias en las que el inglés es la segunda lengua para la gente que rodea la iglesia, y para algunos es muy débil. Es difícil para ellos adorar a Dios en una lengua de la que no están seguros"
Fuente de Gracia ofrece un modelo diferente. Más que una única congregación, se trata de un ministerio multicampus que funciona actualmente en Sanger en colaboración con el Sínodo de la Sierra del Pacífico de la Iglesia Evangélica Luterana en América. El nuevo edificio de 850.000 dólares en el noroeste de Fresno - financiado a través del Programa Presbiteriano de Inversiones y Préstamos , recursos del presbiterio y el Premio Walton - se convertirá en el campus de Fuente de Gracia en Fresno.
"La visión de Alex es que sea una congregación misional", dijo Guekguezian, señalando la ubicación estratégica al oeste de la autopista 99, que funciona como una barrera que muchos residentes nunca cruzan. "No hay otra expresión de la fe reformada en el lado oeste de la principal autopista que atraviesa el Valle Central"
Pero la visión de González va más allá de los edificios. Su vocación, explicó Guekguezian, es "desarrollar un liderazgo fuerte, identificar a las personas con dones espirituales y cualidades de liderazgo, y luego asociarse con el presbiterio y la denominación para equipar a estos líderes"
El presbiterio depende en gran medida de los ancianos gobernantes comisionados, líderes laicos que reciben formación específica para servir a las congregaciones. González proporciona tutoría inicial, luego el presbiterio ofrece instrucción avanzada a través de recursos que incluyen clases en línea en Whitworth University y videos educativos creados por los líderes del consejo medio. "Con la gente de Fuente de Gracia, el entrenamiento de González sería un poco más intensivo y un poco más profundo", dijo Guekguezian.
Este modelo ya está demostrando ser replicable. Fresno Punjabi Church, otra nueva comunidad de culto en el presbiterio que actualmente se reúne en University Presbyterian Church en Fresno, está explorando un enfoque multi-sitio similar, con planes para campus en Merced y Bakersfield. Mientras tanto, Fuente de Gracia prevé otras ubicaciones en Madera y en comunidades del "cinturón naranja", donde las antiguas ciudades productoras de cítricos necesitan revitalizarse.
"El Premio Walton reconoce a las nuevas comunidades de culto más destacadas que trabajan de forma creativa para llevar el Evangelio a sus comunidades locales", escribieron Bethany Fox y Karen Rohrer, copresidentas del Comité de Recursos para el Desarrollo de Misiones, en su recomendación de que Fuente de Gracia recibiera una subvención Walton. El premio apoya a los CNM "cuyo trabajo promueve la misión del PC(USA) en colaboración con sus consejos intermedios"
Para Fuente de Gracia, la financiación llega en un momento crítico. "El coste de los materiales de construcción ha aumentado de forma sustancial, y estos 50.000 dólares nos dan la posibilidad de construir el edificio que imaginamos en lugar de tener que hacer recortes sustanciales", dijo Guekguezian.
Con 20 congregaciones y cinco hermandades que atienden a comunidades de entre 10 y 200 fieles, el Presbiterio de San Joaquín considera Fuente de Gracia un modelo de ministerio sostenible en comunidades de inmigrantes. En palabras de Guekguezian, el proyecto refleja "nuestro compromiso como presbiterio" de estar presentes allí donde la necesidad es mayor.
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